AtlantHy es una empresa española dedicada al sector del hidrógeno renovable, ayudando a empresas a desarrollar sus proyectos en toda su cadena de valor, prestando servicios de consultoría, ingeniería y dando formación especializada.

En diálogo con Energía Estratégica España, portavoces de la empresa comparten su visión sobre el sector del hidrógeno verde en el país: “Creemos firmemente en el potencial de este vector energético”.

Sin embargo, a su vez advierten que para que España pueda convertirse en “un referente internacional” en el sector del hidrógeno, hace falta “un enfoque coordinado” entre la Administración y el sector privado.

“Hoy en día, se consumen cerca de 500.000 toneladas de hidrógeno al año, y esta demanda se multiplicará los años siguientes. Si queremos descarbonizar, hay que poner manos a la obra y trabajar conjuntamente entre las empresas y la administración para desarrollar una industria fuerte y consolidada”, agregan desde la empresa.

En este sentido, comentan que dentro de ese trabajo en conjunto el punto más importante se encuentra en establecer un marco regulatorio “claro y estable” para el sector, que sirva para crear una estrategia a largo plazo y fomentar la inversión en proyectos.

“Si hay algo que aleja más a la inversión que una regulación poco favorable, es la falta de la misma y la incertidumbre que esto genera entre los inversores”, subrayan desde la compañía.

Siguiendo con esta idea, remarcan que el contar con un marco normativo no solo ayudaría a España a fomentar la inversión en infraestructuras, sino también a la cooperación entre empresas e instituciones, establecer “objetivos realistas” para este vector energético en el país, y promover el I+D.

Por otro lado, desde AtlantHy también hacen mención a la generación de una demanda para el hidrógeno verde, explicando que en este caso una de las barreras está en la falta de conocimiento de la molécula y sus posibles aportaciones para “convencer a los consumidores”.

“Así también, muchos procesos con grandes demandas de hidrógeno potenciales, son muy sensibles a su coste. Y muy difícilmente este competirá con el gas natural en condiciones normales. Por ello, desplegar una infraestructura que permita transportar grandes cantidades a largas distancias, a un precio reducido, será clave para el éxito de este sector”, indican desde la empresa.

Por otra parte, ponen el foco otros obstáculos que encuentran para este vector energético, como son las grandes inversiones que hoy son necesarias para estos proyectos, la escasez de materias primas para algunos componentes o el reto de hacer crecer una industria a un ritmo tan rápido como el que se espera.

Así también, resaltan la necesidad de contar con medidas específicas que contribuyan a agilizar la tramitación de los emprendimientos, y con esto adaptarse a “la nueva realidad” de lo que supone una planta de hidrógeno renovable a partir de electrólisis.

“Además, es muy importante acompañarlo con el apoyo al despliegue de plantas de energía renovable que serán fundamentales para el desarrollo de esta tecnología y conseguir una producción competitiva”, indican desde la compañía.

 Objetivos europeos

Por otro lado, desde AtlantHy se mostraron “algo escépticos” sobre la posibilidad de cumplir la meta de producción anual que se propone la Comisión Europea a 2030, que asciende a las 10 millones de toneladas.

“No tanto por la fabricación de electrolizadores, sino también por las necesidades de energías renovables asociadas con las que habría que disponer. Para tener una idea de la magnitud, España necesitaría instalar de aquí a 2030 cerca de 6-7 GW de plantas renovables como solar o eólica dedicadas exclusivamente a la producción de hidrógeno”, agregan desde la empresa.

Asimismo, destacan que en el último tiempo han habido grandes avances en materia de normativas, como la publicación de los Actos Delegados que establecerán la definición de hidrógeno verde en la Unión Europea.

“Sin embargo, todavía queda mucho por delante, ya que para desplegar proyectos de hidrógeno renovable a día de hoy te tienes que ir a normas internacionales, incluso de fuera de la Unión Europea para encontrar respuesta. Es necesario y urgente una actualización de la regulación del sector del hidrógeno con la nueva realidad en la que nos encontramos”, concluyen desde la compañía.