Axon Partners Group, una firma global de inversiones y consultoría, ha establecido criterios específicos para apoyar al sector de energías renovables en España, centrándose en la viabilidad económica, la posibilidad de desinversión en el mediano plazo, un impacto medioambiental altamente positivo y la solidez de los equipos emprendedores.
Tal como describe Luis Castañeda, Partner del grupo de profesionales, la compañía evalúa meticulosamente el mercado y busca que las dinámicas sean favorables para la inversión.
“Nos fijamos en la compañía en sí misma, que tenga un modelo de negocio que sea viable, que los límites económicos funcionen y que tenga un track record probado”, explica el ejecutivo en diálogo con Energía Estratégica España.
Además, enfatiza en que el equipo detrás del proyecto es clave: “Buscamos que sea un equipo sólido, complementario, que tenga un know-how de la industria y esté bien conectado”.
Un aspecto distintivo de Axon es su enfoque en inversiones transversales que no dependan de una única tecnología.
Por ejemplo, en el ámbito de la eólica offshore, la empresa ha optado por no invertir directamente en plataformas flotantes específicas debido al riesgo y la inmadurez del mercado.
En cambio, prefieren soluciones que puedan ser utilizadas por cualquier compañía en este sector, como lo están haciendo en empresas tecnológicas que desarrollan lo que se conoce como “internet de las cosas” en el mundo marítimo, de manera que los promotores de energía offshore puedan utilizarlo al igual que otros sectores.
Lo mismo ocurre con su apuesta por el hidrógeno verde, enfocada en el interés por invertir en fábricas de electrodos para electrolizadores.
“Es una de las áreas que estamos considerando debido a su importancia en la eficiencia y escalabilidad de estos sistemas», señala Castañeda e indica que, de esta manera, no se limitan a un proyecto de producción, sino que pueden ser parte de varios.
España frente a otros mercados
Para el referente de la consultora, España ha sido históricamente pionera en la transición energética, lo que le otorga una posición favorable para seguir desarrollando tecnologías innovadoras en este ámbito.
Castañeda destaca que la combinación de centros universitarios y de investigación proporciona un entorno propicio para el avance de la I+D en energías renovables.
“España tiene el potencial de mantenerse como una de las fuentes clave de desarrollo tecnológico alrededor de la transición energética y del camino al net-zero”, afirma.
Sin embargo, menciona que existen ciertos retos específicos como el lento avance de los mercados incipientes como la eólica offshore y el almacenamiento.
Comparando con otros mercados, Castañeda subraya que, mientras que otros países pueden tener una infraestructura más desarrollada o un mercado más maduro en ciertos aspectos, España ofrece un terreno fértil para la innovación.
“Este potencial, sin embargo, debe ser abordado con una estrategia que combine prudencia y visión a largo plazo”, concluye.
Instrumentos de inversión
Axon Partners invierte desde cuatro fondos diferentes: uno dedicado exclusivamente a la transición energética y tecnología de punta, otro en capital de crecimiento para tecnología de innovación en general, un fondo para empresas públicas en mercados alternativos europeos, y un fondo para inversiones en la región de Andalucía.
En el fondo dedicado a la transición energética, la firma se enfoca en invertir en tecnologías de punta que promuevan la descarbonización y la eficiencia energética.
“Es un fondo que tiene como objetivo en sí mismo generar impacto climático y medioambiental”, aclara el referente de Axon.
El de capital de crecimiento, por otro lado, invierte en empresas de tecnología de innovación en fases más avanzadas, con tickets de inversión más altos.
Este también incluye inversiones en tecnologías relacionadas con la energía, siempre y cuando cumplan con los criterios de innovación y sostenibilidad.
Por su parte, el fondo para empresas públicas se enfoca en invertir en mercados alternativos europeos, buscando oportunidades en empresas tecnológicas innovadoras, incluidas aquellas en el sector de energía.
Finalmente, el fondo para la región de Andalucía invierte tanto en capital como en deuda en empresas con componentes de tecnología de innovación que estén desarrollando soluciones en esta región. Tiene un enfoque de impacto regional, buscando impulsar el desarrollo económico y tecnológico en dicha comunidad autónoma.
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