En la actualidad, los PPAs han evolucionado significativamente para adaptarse a la volatilidad del mercado energético y a las crecientes regulaciones en Europa. Desde 2023, vimos un gran incremento en la actividad, con un despegue de la demanda, especialmente en corporativos, buscando alternativas estables ante la volatilidad del mercado spot. 

Esta tendencia marcó una caída en el precio promedio, que pasó de 45 euros por MWh a inicios del año a cerca de 30 euros a finales de 2023, evidenciando la alta volatilidad del mercado energético.

Miguel Marroquín, Managing Director de Our New Energy, explica que esta transformación ha dado lugar a la sofisticación de las cláusulas contractuales. 

Elementos como la participación en los mercados de ajustes, la definición de eventos de fuerza mayor y, especialmente, las cláusulas de cambio de regulación han evolucionado significativamente. 

En diálogo con Energía Estratégica España, el asesor describe que estas disposiciones permiten renegociar los términos en caso de variaciones legales que impacten el mercado de la energía. 

Esta práctica responde a experiencias recientes, como la implementación de la excepción ibérica durante la crisis del gas en Europa, que alteró los precios fuera del mercado y evidenció la necesidad de flexibilidad contractual; así como el establecimiento de impuestos a las energéticas. 

“Nos hemos dado cuenta de que el Estado tiene mecanismos para influir en el mercado de maneras indirectas, y es por ello que ahora los PPAs dedican páginas enteras a cláusulas que protejan contra estas intervenciones”, describe Marroquín. 

Estos cambios permiten a los generadores reabrir los contratos en caso de impuestos o regulaciones extraordinarias que comprometan la viabilidad económica de la planta. 

Otra de las innovaciones que se observan es la inclusión explícita de cláusulas sobre la participación en los servicios de ajuste. 

Tradicionalmente, estos ingresos adicionales que un generador podía obtener mediante la participación en servicios de balance de red no se mencionaban en los contratos de PPA. 

“A partir del 2023, casi todos los PPAs establecen de forma explícita que los ingresos por servicios de ajuste son exclusivamente del generador,” detalla Marroquín. 

Esta distinción es clave porque asegura que los generadores puedan capitalizar estos servicios de ajuste de forma independiente al precio fijo del PPA.

La razón detrás de esta decisión es el valor significativo que estos ingresos pueden representar en períodos de alta volatilidad del mercado. Algunos compradores corporativos, especialmente las grandes empresas tecnológicas y utilities, intentaron incluir estos servicios en sus contratos de PPA. 

“Los generadores comienzan a dejar claro que esos ingresos extraordinarios no son parte del PPA”, menciona el directivo, lo que asegura una fuente de ingresos independiente para el generador en caso de que los precios de la energía fluctúen nuevamente al alza.

Hibridación de plantas: una nueva dimensión en los PPAs

Los contratos también se han adaptado para anticipar la posible hibridación de plantas de energía, una tendencia creciente en la industria. La hibridación, que permite combinar distintas fuentes de energía como solar y eólica, añade complejidad a los contratos, especialmente en relación con la optimización de almacenamiento de energía mediante baterías. 

“Los PPAs actuales empiezan a incluir cláusulas que especifican qué sucede si el generador decide hibridar la planta”, señala Marroquín, quien añade que esto puede impactar directamente en el perfil de generación y los precios pactados.

Los PPAs anteriores no consideraban esta flexibilidad, pero la hibridación permite mejorar el perfil de exportación de energía, reduciendo riesgos asociados a la intermitencia. Esta cláusula permite al generador adaptarse a futuras necesidades tecnológicas sin requerir el consentimiento del comprador, una ventaja en un sector con una rápida evolución.

“Cuando el generador decide hibridar, se modifica el perfil de exportación de energía; por tanto, es necesario renegociar el PPA si las baterías están ‘behind the meter’”, aclara el referente de ONE.

Los PPAs actuales intentan anticiparse a estas modificaciones, estableciendo acuerdos previos entre comprador y generador para evitar futuras renegociaciones. 

“Muchos compradores pretenden incluir cláusulas que les den derecho a autorizar cualquier hibridación”, indica Marroquín, aunque señala que su experiencia le ha permitido mantener la autonomía del generador en estas decisiones. 

En algunos casos, se incluyen previsiones sobre el uso de baterías y el modo en que la generación híbrida podría cambiar el perfil de precios de la energía.

Perspectiva de seguridad jurídica en el futuro de los PPAs

A pesar de la sofisticación creciente en la estructura de estos contratos, Marroquín enfatiza que los PPAs siguen siendo instrumentos complejos debido a la falta de estabilidad regulatoria en Europa. La inseguridad jurídica es un riesgo latente que dificulta la simplificación de los contratos. 

“El único camino para simplificar estos contratos es que las regulaciones ofrezcan una mayor estabilidad jurídica”, concluye Marroquín y reconoce que, aunque hay intentos para respaldar los PPAs a través de instrumentos de crédito, estos esfuerzos no han tenido un impacto sustancial en la simplificación contractual.

La creciente sofisticación de los PPAs demuestra la adaptabilidad del sector de las energías renovables a los desafíos actuales del mercado. La inclusión de cláusulas de ajuste, cambio de regulación e hibridación de plantas garantiza una mayor estabilidad y flexibilidad en estos contratos, permitiendo que generadores y compradores corporativos se beneficien de un entorno energético en constante cambio. 

Los datos de 2024 evidencian un mercado que sigue innovando y creciendo, con la energía solar y los corporativos liderando la demanda de PPAs en Europa.

Los datos de octubre de 2024 muestran que los PPAs corporativos representan el 87% del volumen total de acuerdos en Europa. Y aunque Reino Unido fue el país con mayor capacidad contratada, España lidera el mercado europeo con la mayor cantidad de PPAs y potencia firmada en lo que va del año. 

Según el último reporte de ONE PPA Tracker, la energía solar fotovoltaica dominó el mercado, abarcando el 56% de los contratos firmados este año​. Este crecimiento ha impulsado a los generadores a incluir en los contratos mecanismos adicionales para proteger sus ingresos.