La semana cerró con la novedad de que el MITECO abrió la consulta pública de la orden reguladora del procedimiento y requisitos aplicables para la concesión de capacidad de acceso de evacuación a la red de transporte de energía eléctrica para módulos de generación de electricidad síncronos de procedencia renovable. 

Según el documento la Capacidad de acceso exclusivamente para MGES será de 1.320 MW. Garoña 220 kV: 151 MW; Guardo 220 kV, 216 MW; Lada 400 kV: 90 MW; Mudéjar 400 kV: 154 MW; Robla 400 kV: 709 MW.

Desde un punto de vista de estabilidad de la red eléctrica, las instalaciones de potencia síncrona, por tratarse de MGES, suponen una ventaja frente a los módulos de parque eléctrico (MPE), ya que aportan de manera natural al sistema propiedades imprescindibles para el correcto funcionamiento de este y para la integración de renovables, siendo por tanto conveniente y necesaria la instalación de generación síncrona mediante fuentes renovables.

Estos  MGES deberán pertenecer a la categoría b) definida en el artículo 2.1 del Real Decreto 413/2014, instalaciones que utilicen como energía primaria: la eólica, la solar o la hidroeléctrica.

«Es importante mencionar que no se realiza mención alguna a las instalaciones de almacenamiento ni a la posibilidad de hibridaciones» destaca Abelardo Reinoso, Consultor y Asesor Técnico de Redes Eléctricas y Energía. 

En diálogo con Energía Estratégica España, el experto asegura que es muy positivo que se promuevan instalaciones que contribuyan a la flexibilidad y la seguridad del suministro en el sistema energético, facilitando la integración de la generación de energía renovable, ya que el proceso de cierre de centrales térmicas de carbón y termonucleares necesita «de forma urgente» la sustitución de la potencia que se desconecta de la red.

Según se expresa en el documento, no podrán optar a solicitar capacidad en estos nudos, instalaciones compuestas por MPE, aunque vengan acompañadas de compensadores síncronos, o MPE que incorporen funciones de control que emulen el comportamiento de MGES.

«Si bien con estas medidas se aporta estabilidad y robustez al sistema eléctrico con potencia síncrona, no se soluciona la intermitencia y volatilidad de las energías renovables», opina Reinoso.

Los nudos de transición justa comprometidos en esta oportunidad son: Garoña 220 kV, Guardo 220 kV, Lada 400 kV, Mudéjar 400 kV y La Robla 400 kV. 

Tal como detalla el Gobierno, el objetivo es, por un lado, aflorar nueva potencia renovable y optimizar su potencial con la generación de beneficios socio-económicos para las zonas afectadas por los cierres de centrales térmicas mediante un procedimiento para su concesión y, por otro lado, contribuir a la flexibilidad y estabilidad del sistema energético, además de favorecer la penetración de nuevas instalaciones renovables en el mismo, mediante la instalación de módulos de generación de electricidad síncronos (MGES).

El plazo para presentar alegaciones desde el viernes, 08 de septiembre de 2023 hasta el viernes, 29 de septiembre de 2023. Podrán remitirse a la dirección de correo: nudos@transicionjusta.gob.es

Por su parte, Sofía Nuñez Mier, Responsable de Desarrollo Proyectos en Ansasol considera que las instalaciones renovables basadas en almacenamiento también pueden comprometer la inercia del sistema, ya que «no la proporcionan de la misma manera que las centrales térmicas convencionales». 

Asimismo, agrega que puede resultar necesario implementar estrategias adicionales para garantizar la estabilidad del sistema eléctrico.

Sin embargo, alega que la energía hidráulica de bombeo reversible una solución eficaz para abordar los desafíos de la inercia del sistema eléctrico español, ya que estas instalaciones actuarían como una especie de «batería hidráulica», lo que puede ayudar a mantener la estabilidad de la frecuencia y la inercia en el sistema eléctrico, especialmente cuando se integran fuentes de energía intermitentes.