Desde el 1 de enero de 2025, el aumento del IVA en la factura eléctrica al 21% ha impactado notablemente en el presupuesto de los hogares españoles. 

Este incremento, sumado al encarecimiento del 13% previsto en la factura eléctrica anual según la OCU, ha acelerado el interés por soluciones sostenibles como el autoconsumo solar, que puede abaratar el gasto energético hasta en un 83%, de acuerdo con datos del barómetro de la empresa Samara.

En diálogo con Strategic Energy Europe, Manel Pujol, cofundador de la firma, explica que la instalación de paneles solares en comunidades de vecinos no solo es una alternativa económica, sino también una solución clave en la transición hacia un modelo energético más sostenible. 

“La instalación de paneles solares ha permitido a muchos propietarios de pisos abaratar su factura de la electricidad un 83% de media, unos 780 euros al año, y vemos como cada año este porcentaje va en aumento”, destaca el ejecutivo.

Según el barómetro de Samara, el costo de una instalación individual cerró 2024 en 5.672 euros, un 18% menos que a principios de año. 

Con una vida útil de los paneles cercana a los 25 años, los propietarios pueden disfrutar de más de 18 años de ahorro neto tras amortizar la inversión en aproximadamente siete años.

En el caso de comunidades de vecinos, las instalaciones colectivas y para zonas comunes han mostrado ser especialmente rentables. 

La inversión por propietario en instalaciones comunitarias asciende a 515 euros, generando un ahorro del 71% en los gastos energéticos anuales de las zonas comunes. 

Por su parte, las instalaciones colectivas permiten ahorrar un 65% del consumo energético individual con una inversión media de 1.722 euros por vecino. 

“Estas instalaciones conjuntas permiten repartir los costes fijos entre los vecinos, ayudando a conseguir un ahorro reseñable con una inversión inicial bastante contenida por propietario”, subraya Pujol.

Para incentivar la adopción del autoconsumo, el Gobierno central y varias administraciones locales han implementado ayudas fiscales que permiten recuperar más del 50% de la inversión inicial, equivalente a unos 2.844 euros para instalaciones individuales. 

Samara, consciente de las dificultades que supone gestionar estas subvenciones, dispone de un equipo especializado en trámites, lo que facilita a los clientes aprovechar al máximo las bonificaciones disponibles. 

“El autoconsumo supone ahorrar 1.000 euros al año, y la inversión inicial se amortiza en unos 7 años. Además, las ayudas pueden llegar a cubrir más de la mitad del desembolso inicial”, señala Pujol.

Adicionalmente, el Gobierno español ha prorrogado las deducciones del IRPF para obras de mejora energética, que se suman a programas locales como el Plan Rehabilita en Madrid o las bonificaciones en el ICIO e IBI en ciudades como Sevilla, Valencia y Barcelona. 

Estas medidas, combinadas con los esfuerzos de la Unión Europea para fomentar la eficiencia energética en edificios, apuntan a que el autoconsumo siga ganando terreno en 2025.

Asimismo el referente de la compañía también resalta el papel estratégico de España en la adopción del autoconsumo gracias a sus 300 días de sol al año, pero advierte que aún existen barreras como la burocracia y la falta de adopción masiva de baterías de almacenamiento, fundamentales para optimizar la generación y el consumo energético. 

“El autoconsumo en edificios residenciales ha mostrado un gran rendimiento en 2024, y cabe esperar que siga creciendo en el contexto actual de encarecimiento de la factura e impulso regulatorio por parte de la Unión Europea”, concluye.