Elecnor, uno de los líderes en la construcción de proyectos renovables, se enfrenta a un mercado español marcado por precios de energía poco competitivos, demanda insuficiente y desafíos en la aceptación social. 

Manuel Murias, responsable de Desarrollo de Negocios Internacional, subraya que este panorama obliga a replantear cronogramas y objetivos en el mercado local. 

Esta situación afecta especialmente a la energía fotovoltaica, cuya rentabilidad se ve comprometida, y a la eólica, que enfrenta rechazos sociales significativos, sobre todo en regiones como Galicia y Cataluña.

El Real Decreto Ley 8/2023, que extendió los plazos administrativos, permitió salvar gran parte de los 28 GW con permisos de la administración que habrían perdido sus puntos de conexión. 

Sin embargo, también generó retrasos significativos en la construcción, ya que los desarrolladores buscan condiciones más favorables. 

“Muchos promotores están eligiendo fechas de conexión para finales de 2027 o 2028, lo que indica que esos proyectos se están moviendo hacia el largo plazo”, detalla Murias en diálogo con Energía Estratégica España.

Este escenario podría generar una baja en la actividad constructiva hacia fines de 2025 y 2026, a menos que se reactive significativamente la demanda o suban los precios de la energía, según considera.

“Idealmente, los desarrollos que se conectarán en 2028 deberían iniciar sus obras hacia finales de 2026 para cumplir con los cronogramas. De lo contrario, será imposible llegar a tiempo”, añade, ya que esto implica comenzar obras en plazos muy ajustados, especialmente para parques mayores a 50 MW, que suelen requerir entre 12 y 14 meses de construcción.

En este contexto, el almacenamiento emerge como una pieza clave, pero su implementación también enfrenta barreras, ya que los modelos financieros para incorporar baterías son inviables con los precios actuales de energía en España, según confirman desde la compañía y exigen mayor claridad en las reglas de juego para incentivar esta tecnología.

Murias describe esta situación como “un indicador de que muchos desarrolladores no tienen intención de construir, al menos bajo las condiciones actuales”, señalando la creciente tendencia de los promotores a poner en venta sus proyectos antes de avanzar a fases operativas.

La cadena de suministro también juega un papel crucial en el desarrollo de renovables. Según el directivo, el año pasado la industria estaba preocupada por la capacidad de respuesta de los proveedores, una preocupación que ahora parece haberse disipado parcialmente.

Sin embargo, la postergación de la puesta en marcha de los proyectos podría generar nuevamente tensiones en la disponibilidad de contratistas y materiales hacia finales de la década.

A pesar de las dificultades, Elecnor mantiene su compromiso con el desarrollo local. “En España estamos enfocados en incorporar a la comunidad local en nuestros proyectos. Esto incluye la formación de personal y la generación de empleo estable en regiones remotas”, sostiene el representante de la firma.

Estrategia global: mercados internacionales como vía de crecimiento

Con un entorno local desafiante, Elecnor apuesta por su internacionalización. La empresa ha acumulado un track record global de 7.2 GW en fotovoltaica y 7 GW en eólica on-shore, además de ocho proyectos de almacenamiento en países como Australia y México.

Uno de los más destacados es el sistema BESS Apply Blyth en Australia, con una capacidad de 200 MW por dos horas, que Murias describe como “el unicornio dentro de nuestro portafolio”. 

En Chile, Brasil y México también se observan grandes oportunidades, particularmente en baterías, aunque cada mercado tiene sus propias complejidades. “Chile es el más desarrollado en Latinoamérica, mientras que en México aún falta claridad regulatoria para avanzar”, describe.