Toda Energía es una sociedad sin fines de lucro que está integrada por el Centro Nacional de Energías Renovables (CENER), Edinor y las Cámaras de Comercio e Industria, de cada región. Asimismo, la puesta en marcha depende de los fondos Next Generation de los programas CE Implementa y las diferentes ayudas de los ayuntamientos.
Nació como un proyecto de Navarra, donde ya está en funcionamiento Toda Navarra y se le suman: Toda Sevilla, Toda Alicante. [Ver artículo]
En los próximos días terminarán de constituirse las sociedades en La Rioja, Cantabria, Almería, Valladolid, Huesca, Reus, Castellón, Campo de Gibraltar, Alicante, Guipuzcoa, Valencia y Castellón.
El proyecto promueve inversiones sobre las cubiertas de los edificios municipales, con el fin de generar energía compartida con los vecinos.
Además de incorporar un plan de instalación de puntos de recarga de vehículos eléctricos, de los cuales llevan instalados dos unidades. Aunque cada una de las iniciativas realiza su propia propuesta.
La nueva etapa del proyecto involucra a más de 30 municipios que sumarán entre 4 y 5 MW para más de 4000 beneficiarios.
Para dicha iniciativa se aplicará en el programa de ayudas de CE Implementa IV, ya que se requerirán más de un millón de euros de inversión.
Los cambios normativos, como la ampliación de la conexión de 500 a 2000 metros, apuntan a una gran apuesta por la generación distribuida que se refleja en el éxito de este tipo de proyectos.
“Los avances en infraestructura que hoy tenemos en el país, la digitalización de los contadores, la evolución en el organismo gestor y la capacidad de integrar la energía renovable al sistema nos permite soñar con esta transición energética a pesar de que llevábamos décadas de retraso”, declara José Andrés Palacios, Director General de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Navarra.
Además, observa que en este 2023 los sectores industriales que no son electrointensivos, optarán por sumarse a estas modalidades de autogeneración, lo que promoverá aún más el mercado.
No obstante, en diálogo con Energía Estratégica España, el ejecutivo asegura que la gran cantidad de proyectos puede generar un cuello de botella en los servicios necesarios para su desarrollo.
En este sentido afirma: “Hemos recibido reclamos de muchos socios por la baja calidad tanto de los materiales como del personal”, con lo cual recomienda poner atención a crear un marco jurídico que brinde mayores garantías a los consumidores.
Otra de las sugerencias que realiza el directivo refiere a que los cupos a programas de ayudas financieras para los proyectos se acaban a media hora de haber abierto las ventanillas. Con lo cual, manifiesta que deberán medirse los proyectos por su garantía de solvencia.
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