En el marco de la charla sobre tecnologías de hidrógeno renovable, organizado por la Fundación Cumplutense, María Jaén Caparrós, Coordinadora General de Green Hyland Enagás, destacó que la empresa está desarrollando cada vez más proyectos renovables.

En este sentido, remarcó la importancia que tendrán tecnologías como el hidrógeno verde en la descarbonización y la transición energética. Es por eso que, aprovechando las infraestructuras actuales y desarrollando nuevas, están empezando a trabajar con estas tecnologías.

Siguiendo esta idea, hizo hincapié en el proyecto Green Hysland, en el cual trabajan en conjunto con Acciona, el Instituto para la Diversificación y Ahorro Energético (IDAE) y Cemex.

Este emprendimiento, ubicado en Mallorca, Islas Baleares, tiene una potencia de 2,5 MW de hidrógeno renovable, producido mediante electrólisis. “Desde el comienzo, sabíamos que tenía que tener dos características: Generar riqueza, y que se quede en la región, y que además esté alineado con las estrategias locales. En este caso, la hoja de ruta Mallorca 2040”, explicó la directiva.

El electrolizador de esta planta será alimentado por energía fotovoltaica, generada por dos plantas también construidas por Enagás: Lloseta, que tiene una capacidad de 8,5 MW;  y Petra, cuya potencia será de 6,8 MW.

“Parte de la inversión proviene de fondos europeos, nos presentamos y fuimos adjudicatarios de unas ayudas para proyectos de hidrógeno renovable. En total, son €10 millones”, explicó la ejecutiva.

Por el lado de la producción, Jaén Caparrós advirtió que aún se encuentran en la producción de las primeras moléculas, pero que esperan poder producir 300 toneladas anualmente, antes de que termine el año..

“El hidrógeno verde generado tendrá múltiples usos en la isla, como la generación de calor y energía para edificios comerciales y públicos, y la creación de una estación de abastecimiento y suministro de combustible a flotas de autobuses y vehículos de alquiler de pila de combustible”, recalca la directiva.

En el caso de la movilidad, el hidrógeno será transportado hacia la Empresa Municipal de Transporte de Palma de Mallorca (EMT), donde abastecerá cinco autobuses, que ya fueron licitados y adjudicados a Solaris. Esperan que las primeras unidades lleguen en febrero, y las siguientes en marzo.

Asimismo, la ejecutiva indicó que la estación de servicio que les va a administrar hidrógeno va a estar en las cocheras de la EMT, para simplificar su suministro.

Otro de los usos que tendrá este vector energético será para un hotel en Palma, que incomporará una pila de combustible de 70 kW, que ayudará a suministrar electricidad renovable y calor a sus instalaciones.

Por otro lado, también se producirá una pila de combustible de 100 kW para las estaciones marítimas número dos, tres y cuatro del puerto de Mallorca. Estas se encuentran en el medio de una restructuración, y se han propuesto ser emisiones de carbono cero.

La última implementación con pilas de combustible será para el estadio polideportivo de la ciudad de Lloseta, que la utilizará para suplir su consumo eléctrico y de calor.

Y finalmente, Enagás desarrollará un hidroducto para distribuir el hidrógeno a toda la región de las islas. Ya cuentan con una primera parte, que llega hasta un punto de inyección a la entrada de la isla, y hará falta construir una segunda que complete este esquema.