La Comisión Europea ha aprobado el plan de recuperación y resiliencia modificado de España, que ahora asciende a un total de 163.000 millones de euros, compuesto por 83.000 millones en préstamos y 80.000 millones en subvenciones para la transición energética. 

Este incluye un capítulo dedicado a REPowerEU, con medidas destinadas a diversificar las fuentes de energía y reducir la dependencia de los combustibles fósiles, acelerando la transición hacia energías renovables, el hidrógeno renovable, la descarbonización de la industria y la inversión en la cadena de valor para la industria Net Zero. 

Además, se prioriza la lucha contra el cambio climático asignando el 40% de los fondos disponibles a medidas relacionadas con este objetivo, lo que representa un total de 65.000 millones de euros. 

El Consejo dispondrá ahora, en principio, de cuatro semanas para aprobar la evaluación de la Comisión. El refrendo del Consejo permitirá a España recibir 1.400 millones de euros en concepto de prefinanciación con carga a los fondos REPowerEU.

Con carga al MRR, España ha recibido hasta la fecha 37.000 millones de euros: 9.000 millones de euros en concepto de prefinanciación y 28.000 millones de euros desembolsados ​​en total en los tres primeros pagos.

La Comisión autorizará nuevos diseños en función del cumplimiento satisfactorio de los hitos y objetivos indicados en el plan de recuperación y resiliencia revisado de España, reflejando los avances en la ejecución de las inversiones y las reformas.

La ampliación de la inversión apoyará el autoconsumo, el almacenamiento y las comunidades de energía. Además, también se prevén grandes inversiones, estructuradas como instrumentos financieros, con lo cual el impacto en el mercado español de renovables podría ser significativo y positivo. 

“Supone una visión y un apoyo institucional para que el país pueda convertirse en un referente a nivel europeo y mundial en lo referente a transición ecológica”, afirma Sofía Nuñez Mier, Responsable de Desarrollo Proyectos Hidrógeno y Gestión Recurso Hídrico en Ansasol. 

En diálogo con Energía Estratégica España, la analista enfatiza que, además, estos objetivos son pasos cruciales hacia la independencia energética y que se presenta el gran reto de saber aprovechar este dinero extra para garantizar que se cumplan los objetivos establecidos y se logre un impacto positivo en la economía y la sociedad. 

Tal como lo manifiesta Alejandro Diego Rosell, Profesor de EOI y Consultor en Nuvix Consulting, “Su implementación debe ser cuidadosa y con supervisión continua ya que aumenta la deuda pública y la dependencia de préstamos y subvenciones podría plantear desafíos financieros a largo plazo”. 

Por su parte Nuñez Mier observa que se debería de seguir trabajando en la atracción de talento, dentro de las cuestiones sociales, ya que “España debe luchar porque la inversión en capital humano sea una de las principales palancas para su crecimiento y prosperidad futura”.

“Desde el sector del hidrógeno verde, considero que se debería realizar un estudio sobre cómo incentivar el desarrollo de esta nueva industria; si como apoyo de inversión inicial o como un proceso de concurrencia competitiva de precio de venta, tal y como se comienza a realizar a nivel europeo el próximo noviembre”, concluye la referente de Ansasol.