Vecinos de Madrid reclaman que llevan dos años tramitando una subvención para su instalación de autoconsumo, uno de los testimonios detalla en redes: “Tras superar el plazo de dos años, acabo de completar el expediente de solicitud de la subvención del programa de incentivos 4 por la instalación de placas solares en mi vivienda”.
El mismo reconoce 600 euros/kW instalado. Sin embargo, la burocracia llevó hasta el hartazgo a los usuarios.
“Dos años, 39 documentos y 8 meses de propaganda gratuita falsa para tramitar una subvención, de la que todavía no tengo idea de cuándo abonarán”, describe uno de ellos.
En diálogo con Energía Estratégica España, el vecino expresa su frustración por la falta de justificación y la prolongada espera: “Es un pasar el tiempo y no resolver que aburre”.
En este sentido, describe que después de validar la oferta del instalador y completar la instalación en 15 días y denuncia: “A partir de ahí, no dan ninguna previsión; simplemente a esperar y de vez en cuando recibir señales de vida pidiendo nueva documentación”.
A la burocracia se le suma un precio de la energía poco alarmante para los consumidores y otros factores que no dejan ver más que un ritmo de nuevas instalaciones de autoconsumo que cae 15% en el segmento residencial, durante el primer trimestre del año, respecto al 2023, según datos del Observatorio de UNEF.
El Gobierno ha destinado 1.552 millones de euros de fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) a subvenciones directas los cuales el MITECO ha distribuido entre las comunidades autónomas, encargadas de gestionar el reparto hasta el beneficiario final.
“La tramitación de las ayudas europeas al autoconsumo que impulsaron el sector durante el año 2022 ha sido gestionada de forma muy dispar entre distintas Comunidades Autónomas”, comenta a Energía Estratégica España, el presidente de Autoconsumo de APPA Renovables, Jon Macías Santiago.
Según describe, el motivo fue en parte porque hubo regiones que destinaron más recursos que otras para agilizar esa tramitación y también porque en algunas zonas de España se llevaron a cabo muchas más instalaciones que en otras.
Algunos datos encontrados revelan que, mientras País Vasco logró gestionar más del 81% de sus trámites hasta mayo, Extremadura sólo logró el 1%.
Macías Santiago subraya que, aunque la tecnología fotovoltaica es rentable por sí misma y no necesita mayores incentivos, la Asociación aboga por exenciones fiscales en lugar de subvenciones directas, ya que “son más predecibles y requieren de menor carga administrativa de las Administraciones Públicas, lo que redunda en una mayor velocidad y eficiencia”.
La burocracia y la disparidad en la gestión de ayudas no solo desalientan a los ciudadanos a invertir en energía solar para sus tejados, aunque desde el sector aseguran de que los 19 GW que se propone el nuevo PNIEC hacia 2030 son realizables.
Cabe aclarar que en él se incluyen los segmentos industriales y comerciales.
No obstante, la necesidad de una mayor coordinación y simplificación en la tramitación de ayudas es urgente para asegurar que España pueda aprovechar plenamente el potencial de los fondos europeos NextGeneration.
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