Según datos publicados por APPA Renovables, el autoconsumo ha crecido a un ritmo anual superior al 90% desde 2018, acumulando 5.211 MW de potencia instalada hasta diciembre de 2022. 

Solo en el último año se realizaron 217.248 instalaciones residenciales y 23.096 instalaciones de tipo industrial y se espera que el 2023 sea el año en donde se consolide el segmento industrial, permitiendo un mayor crecimiento. 

El auge del autoconsumo despertó el interés de compañías como S-5, que se dedican a la fabricación de estructuras para paneles solares sobre tejado metálico. 

La firma cuenta con 30 años de experiencia en América, hace 17 años que comercializa en Europa y recién hace un año ingresó en España. 

“Se nos ha hecho muy atractivo el mercado español y nuestra misión fundamental es aportar toda nuestra experiencia y facilitar la instalación a nuestro cliente final: el instalador”, afirmó Alex Fuentes, Latam/Europe Field Specialist de S-5.

En el marco del Europe Future Energy Virtual Summit 2023, durante el panel sobre Reducción de LCOE: Nuevas propuestas de la cadena de valor fotovoltaica, el ejecutivo comentó que el foco de su estrategia está en controlar los procesos de fabricación. 

En este sentido, explicó que, si bien la empresa está en Colorado, la fábrica se ubica en Texas, a 2 horas de donde se extrae la materia prima, consiguiendo una reducción significativa de los costes y un mayor control de calidad de los productos. 

Sus estructuras son de fijación directa, de pequeño tamaño, lo cual requiere de menos cantidad de material para su fabricación, produciendo todos los días del año a toda hora y facilitando la logística hacia cualquier país del mundo.

“Controlar toda la cadena nos permite tener autosuficiencia en el mercado y no depender de materia prima de países externos”, señaló Fuentes y aclaró que España tiene “gran potencial” para desarrollar mejor calidad en su propia industria si se lo propone, de manera que pueda lograr mayor independencia en la cadena de suministros.