600 MW para 2026, es el objetivo que tiene para el almacenamiento el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), de acuerdo a sus compromisos con la Unión Europea (UE), con un presupuesto final estimado de €684 millones.

Para ello se lanzaron distintas ayudas. Una tiene que ver con el autoconsumo que incluye almacenamiento. Otra son líneas para proyectos innovadores de I+D, y además, dentro de la cuarta subasta de renovables, que se encuentra en consultas públicas, se permite la hibridación con módulos de “storage”.

“Y luego aún queda pendiente una para almacenamiento ‘stand alone’, pero para eso es necesaria una aprobación de la Comisión Europea”, señala Raúl García Posada, Director de la Asociación Española de Almacenamiento de Energía (ASEALEN), en diálogo con Energía Estratégica España.

Además, el directivo apunta a que podrían sumarse nuevas ayudas dentro del Real Decreto de energía sostenible para las Islas, tanto Baleares como Canarias. “Con todo esto, se busca alcanzar esos 600 MW”, comenta el especialista.

En este sentido, García Posada señala que es probable que este objetivo se pueda cumplir, pero a base principalmente de baterías, relegando otras tecnologías de almacenamiento.

“El texto no pone límites, pero las ayudas del PRTR marcan que para el año que viene todo debe estar adjudicado, y construído antes de 2026. En tres o cuatro años las baterías no deberían tener problema -para que un proyecto pueda desarrollarse, construirse y ponerse en operación-, pero los bombeos, por ejemplo, claramente quedan fuera, debido a sus largos tiempos de construcción”, señala García Posada.

Asimismo, explica que la termosolar no tendría dificultades en cuestiones de plazos, pero su implementación es complicada debido a sus “elevados riesgos”, tanto desde el costado de la ingeniería, como por los problemas del mercado de suministros.

Por el lado del hidrógeno renovable, el directivo remarca que no ve al energético como una posible competencia para las baterías, al menos en el almacenamiento exclusivo de energía eléctrica. 

PNIEC

Por otra parte, pensando en los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), resalta una situación similar y marca que todas las tecnologías, menos las baterías, se encuentran atrasadas.

Cabe señalar, que en el PNIEC se establece que para el año 2030 se deberán añadir 6 GW de almacenamiento, provenientes en mayor medida del bombeo (3,5 GW) y el resto en baterías (2,5 GW) “La situación para tecnologías como el bombeo es cada vez más complicada de cumplir”, añade el especialista.

Aunque, recuerda que este plan entró a consultas públicas esta semana para ser revisado. “Aún no hemos lanzado nuestra propuesta concreta pero, será en la línea de incrementar la capacidad de almacenamiento, porque se está poniendo en evidencia su necesidad”, indica García Posada.