En España, la energía eólica es la tecnología de mayor potencia instalada, incluyendo las no renovables, con un total de 29.512 MW. Asimismo, se planea continuar desarrollando esta energía hasta los 50 GW en el 2030.

En diálogo con Energía Estratégica España, el Coordinador de Seguridad y Salud y especialista en sector eólico, Fernando Diéguez Álvarez, repasa los principales problemas que encuentra a la hora de prever accidentes en la construcción de instalaciones de este tipo.

“Lo primero que hay que mejorar es la mentalidad de las empresas, algunas quieren vender que ‘la prevención es de todos’, y luego ponen por delante el dinero. Entiendo que hay que generar riqueza, pero también hay que cuidar a las personas que la generan”, remarca el experto.

“En España se piensa que es todo papeleo o que se ponen obstáculos. Cuando en realidad, se está para ayudar, son compañeros que van a prevenir que ocurran accidentes”, enfatiza Diéguez Álvarez.

Por otro lado, también resalta que la administración debería cambiar su enfoque sobre los informes de accidentes, ya que las empresas no tienen la obligación legal de hacerlos públicos.

“Es una gestión interna de cada empresa, nadie va a sacar sus errores a la luz, no sería lógico. Pero en este sentido, a la previsión no habría que verla como un error, más bien como una enseñanza para que no se repita la situación”, destaca el especialista.

Lo que se mejoró

Por otra parte, el experto explica que el sector avanza continuamente, y un ejemplo de ello está en la formación específica para la prevención de accidentes en el sector eólico, algo que se desarrolló en los últimos años.

“Hoy en día, todas las empresas exigen el haber completado la instrucción de Global Wind Organization (GWO). Además, va recibiendo ampliaciones casi todos los años. Se están implantando cursos de hidráulica, temas de ascensores, de manipulación manual de cargas, etc.”, recalca Diéguez Álvarez. 

Accidentes habituales

Finalmente, el especialista detalla algunos de los percances más comunes en este tipo de construcciones: “Suelen ocurrir más lo que son al mismo nivel, torceduras de tobillo y los golpes”.

“Al final, estás con distintas herramientas, con máquinas de apriete, de tensionado, es como suele pasar en cualquier obra, uno siempre quiere cero accidentes, pero todos sabemos que cuando se está trabajando estamos expuestos a riesgos”, indica el especialista.

Asimismo, pero en menor medida, explica que puede haber también el riesgo de caídas en altura, que tiene su pasado en el sector debido a negligencias. Aunque, comenta que esto “no es lo habitual hoy en día”.