La integración de las energías renovables en el sistema eléctrico ha desencadenado una transformación sin precedentes en la infraestructura energética, dando lugar a innovaciones que no solo facilitan su incorporación, sino que también aprovechan modernas tecnologías de información para gestionar de manera eficiente el flujo de energía. 

La tecnología Grid Forming es una innovación en el ámbito de las redes eléctricas que está revolucionando la forma en que se gestionan y controlan los flujos de energía. 

El ingeniero Adolfo Ausín, responsable de electrónica de potencia de Norvento Energía, y Antonio Gómez-Expósito, catedrático de Ingeniería Eléctrica en la Universidad de Sevilla, señalan que los avances que se están dando a nivel de I+D+i en este sentido son rápidos y provechosos para el desarrollo de las energías renovables. 

En esencia, la tecnología Grid-Forming se centra en el diseño, la topología y el control de los convertidores de fuente de tensión. Estos convertidores son elementos fundamentales en la transición de sistemas eléctricos convencionales basados en máquinas síncronas hacia sistemas más flexibles y dinámicos. 

“Este período de transición tiene que ser gradual no puede ser de otra forma y eso llevará como tres décadas incluso más, en las que convivirán con la tecnología Grid-Following”, señala Gómez-Expósito y aclara que “aunque esto ya es una realidad, no se ha implantado aún”. 

Uno de los principales desafíos que enfrenta la tecnología grid-forming es la gestión de las corrientes de cortocircuito. 

Ausín señala que los sistemas basados ​​en electrónica de potencia tienden a tener corrientes de cortocircuito más bajas que sus contrapartes convencionales, lo que plantea preocupaciones sobre su capacidad para garantizar la confiabilidad del sistema. 

Sin embargo, el catedrático explica que se vislumbra una solución en el horizonte, con la implementación de compensadores síncronos y el desarrollo de sistemas de protección más atractivos capaces de detectar y aislar adecuadamente las fallas, incluso con corrientes de cortocircuito bajas.

Otro aspecto discutido es el papel de la tecnología grid forming en instalaciones aisladas de la red principal, como aquellas destinadas a la producción de hidrógeno. 

Si bien no se ha profundizado en este campo, coinciden en que el nivel de tensión utilizado dependerá en gran medida de la potencia de la planta y de las consideraciones económicas. 

Además, señalan la importancia de la interconexión con la red principal para garantizar la estabilidad y confiabilidad del suministro.