La Comisión Europea ha aprobado un programa español de 837 millones de euros para apoyar la producción de baterías para la cadena industrial de vehículos eléctricos y conectados para impulsar la transición a una economía neta cero, en línea con el Plan Industrial Green Deal . 

El esquema fue aprobado bajo el Marco Temporal de Crisis y Transición de Ayudas Estatales, adoptado por la Comisión el 9 de marzo de 2023 para apoyar medidas en sectores que son clave para acelerar la transición verde y reducir la dependencia del combustible. 

El nuevo Marco modifica y prorroga en parte el  Marco Temporal de Crisis, adoptado el 23 de marzo de 2022para permitir a los Estados miembros apoyar la economía en el contexto de la actual crisis geopolítica, ya modificado el 20 de julio de 2022 y el 28 de octubre de 2022.

La medida española

España notificó a la Comisión, en el marco del Marco Temporal de Crisis y Transición, un plan de 837 millones de euros para apoyar la producción de baterías para la cadena industrial de vehículos eléctricos y conectados.

Bajo este esquema, que se financiará parcialmente a través del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (‘RRF’), la ayuda tomará la forma de subvenciones y préstamos directos.

La medida estará abierta a las empresas que produzcan baterías, sus componentes esenciales y materias primas relacionadas.

El importe máximo de la ayuda por beneficiario (i) oscilará entre 100 y 300 millones de euros para la inversión en el ámbito de las baterías, según se realice en zona asistida o no; (ii) no superar los 100 millones de euros para inversiones en componentes esenciales; y (iii) no superar los 25 millones de euros para inversiones en materias primas.

La Comisión constató que el régimen español se ajusta a las condiciones establecidas en el Marco Temporal de Crisis y Transición. En particular, la ayuda (i) incentivará la producción de equipos relevantes para la transición hacia una economía neta cero; y (ii) se otorgará a más tardar el 31 de diciembre de 2025.

La Comisión llegó a la conclusión de que el régimen español es necesario, apropiado y proporcionado para acelerar la transición verde y facilitar el desarrollo de determinadas actividades económicas, que son importantes para la ejecución del Plan Industrial Green Deal, de conformidad con el artículo 107, apartado  3 . c) TFUE y las condiciones establecidas en el Marco Temporal de Crisis y Transición.

Sobre esta base, la Comisión aprobó la medida de ayuda con arreglo a las normas sobre ayudas estatales de la UE.

Fondo

El 9 de marzo de 2023 , la Comisión adoptó un nuevo Marco Temporal de Crisis y Transición para fomentar medidas de apoyo en sectores que son clave para la transición a una economía neta cero, en línea con el  Plan Industrial Green Deal . Junto con la enmienda al  Reglamento General de Exención por Categorías  (‘GBER’) que la Comisión aprobó  el mismo día , el Marco Temporal de Crisis y Transición ayudará a acelerar la inversión y la financiación para la producción de tecnología limpia en Europa. También ayudará a los Estados miembros a cumplir proyectos específicos en el marco de los Planes Nacionales de Recuperación y Resiliencia que estén dentro de su alcance.

El nuevo Marco modifica y prorroga en parte el Marco Temporal de Crisis , adoptado el  23 de marzo de 2022 , para permitir a los Estados miembros utilizar la flexibilidad prevista en las normas sobre ayudas estatales para apoyar la economía en el contexto de la guerra de Rusia contra Ucrania. 

El Marco Temporal de Crisis se modificó el 20 de julio de 2022 para complementar el paquete Gas seguro para un invierno seguro y en línea con los objetivos del Plan REPowerEU. El marco temporal de crisis se volvió a modificar el 28 de octubre de 2022 de conformidad con el Reglamento sobre una intervención de emergencia para hacer frente a los altos precios de la energía y la Regulación que mejora la solidaridad a través de una mejor coordinación de las compras de gas, precios de referencia confiables e intercambios de gas a través de las fronteras .

El Marco Temporal de Crisis y Transición prevé los siguientes tipos de ayuda, que pueden ser concedidas por los Estados miembros:

• Importes limitados de las ayudas , en cualquier modalidad, para las empresas afectadas por la crisis actual o por las sanciones y contrasanciones posteriores hasta la cuantía incrementada de 250.000€ y 300.000€ en los sectores de agricultura, pesca y acuicultura respectivamente, y hasta 2€ millones en todos los demás sectores;
• Apoyo a la liquidez en forma de garantías estatales y préstamos subvencionados . En casos excepcionales y sujetos a salvaguardias estrictas, los Estados miembros pueden proporcionar a las empresas de servicios públicos de energía para sus actividades comerciales garantías públicas que superen el 90 % de cobertura, cuando se proporcionen como garantía financiera no fondeada a las contrapartes centrales o a los miembros compensadores.
• Ayudas para compensar los altos precios de la energía. La ayuda, que puede concederse en cualquier forma, compensará parcialmente a las empresas, en particular a los usuarios intensivos de energía, por los costes adicionales debidos a las condiciones excepcionales de  gas y electricidad. aumento de precios. El importe de la ayuda individual podrá calcularse en función del consumo pasado o presente, teniendo en cuenta la necesidad de mantener los incentivos del mercado para reducir el consumo de energía y garantizar la continuidad de las actividades económicas. Además, los Estados miembros pueden prestar apoyo de forma flexible, incluso a los sectores de gran consumo energético especialmente afectados, sujeto a salvaguardias para evitar una compensación excesiva e incentivar la reducción de la huella de carbono en caso de ayudas superiores a 50 millones EUR. También se invita a los Estados miembros a considerar, de manera no discriminatoria, el establecimiento de requisitos relacionados con la protección del medio ambiente o la seguridad del suministro. 
• Medidas que aceleran el despliegue de las energías renovables . Los Estados miembros pueden establecer planes para inversiones en todas las fuentes de energía renovables, incluido el hidrógeno renovable, el biogás y el biometano, el almacenamiento y el calor renovable, incluso a través de bombas de calor, con procedimientos de licitación simplificados que se pueden implementar rápidamente, al tiempo que incluyen garantías suficientes para proteger el nivel. campo de juego. En particular, los Estados miembros pueden idear esquemas para una tecnología específica, que requiera apoyo en vista de la combinación energética nacional particular. Las condiciones para la concesión de ayudas a pequeños proyectos y tecnologías menos maduras, como el hidrógeno renovable, se han simplificado eliminando la necesidad de un proceso de licitación competitivo, sujeto a ciertas salvaguardas;
• Medidas que faciliten la descarbonización de los procesos industriales. Para acelerar aún más la diversificación de los suministros energéticos, los Estados miembros pueden apoyar las inversiones para la eliminación gradual de los combustibles fósiles, en particular a través de la electrificación, la eficiencia energética y el cambio al uso de hidrógeno renovable y basado en la electricidad que cumpla determinadas condiciones, con posibilidades ampliadas para apoyar la descarbonización de los procesos industriales que cambian a combustibles derivados del hidrógeno. Los Estados miembros pueden (i) establecer nuevos sistemas basados ​​en licitaciones o (ii) apoyar proyectos directamente, sin licitaciones, con ciertos límites en la parte del apoyo público por inversión. Se prevén bonificaciones complementarias específicas para las pequeñas y medianas empresas, así como para soluciones especialmente eficientes desde el punto de vista energético. En ausencia de licitaciones, se ha introducido otro método más simple para determinar el nivel de apoyo máximo; y
• Medidas destinadas a apoyar la reducción de la demanda de electricidad , en línea con el Reglamento sobre una intervención de emergencia para hacer frente a los altos precios de la energía .
• Medidas para acelerar aún más las inversiones en sectores clave para la transición hacia una economía neta cero,permitir el apoyo a la inversión para la fabricación de equipos estratégicos, a saber, baterías, paneles solares, turbinas eólicas, bombas de calor, electrolizadores y uso y almacenamiento de captura de carbono, así como para la producción de componentes clave y para la producción y el reciclaje de materias primas críticas relacionadas. Más concretamente, los Estados miembros pueden diseñar planes sencillos y eficaces que proporcionen un apoyo limitado a un determinado porcentaje de los costes de inversión hasta importes nominales específicos, en función de la ubicación de la inversión y el tamaño del beneficiario, siendo posible un mayor apoyo para las pequeñas y medianas empresas. medianas empresas («PYME»), así como empresas situadas en regiones desfavorecidas, para garantizar que se tengan debidamente en cuenta los objetivos de cohesión. Además, en casos excepcionales, los Estados miembros pueden proporcionar un mayor apoyo a empresas individuales, cuando exista un riesgo real de que las inversiones se desvíen de Europa, sujeto a una serie de salvaguardias. 

Las entidades controladas por Rusia sancionadas quedarán excluidas del alcance de estas medidas.

Las medidas particularmente importantes para acelerar la transición ecológica y reducir la dependencia de los combustibles estarán vigentes hasta el 31 de diciembre de 2025. Esto se refiere en particular a las medidas que aceleran el despliegue de las energías renovables y el almacenamiento de energía, las medidas que facilitan la descarbonización de los procesos industriales y las medidas para acelerar aún más las inversiones en sectores clave para la transición hacia una economía neta cero.