La semana pasada, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) publicó la propuesta de Real Decreto para la regulación para las comunidades energéticas en España.

Dentro del documento se destacan dos aspectos importantes para el sector, la primera es que las comunidades energéticas podrían participar en las subastas del Régimen Económico de Energías Renovables (REER), y además, contarían con una reserva de capacidad en los concursos de acceso a la red eléctrica.

Valoración

En diálogo con Energía Estratégica España, el Presidente de Red de Comunidades Energéticas S. Coop., Rafael Larreina Valderrama, destaca la importancia de esta medida, al suponer un reconocimiento a las comunidades energéticas.

“Tanto como agente activo en el sistema eléctrico, como sistema alternativo, y a la vez participativo a la hora de gestionar la energía eléctrica renovable”, agrega el directivo.

Por su parte, Jon Macías, Presidente de autoconsumo en APPA Renovables, comenta que se trata de una normativa que el sector renovable, y particularmente el del autoconsumo, lleva esperando mucho tiempo.

«Otros países de nuestro entorno han ido regulando las comunidades energéticas y este primer paso es una buena noticia. Que se incorporen a las subastas y se reserve capacidad de acceso es una apuesta clara por la estabilidad y la capacidad de financiación de estos proyectos, así como por su viabilidad técnica al contemplar capacidad para conexión a red», agrega el directivo.

Subastas REER y concursos de capacidad

Analizando el apartado donde se incorpora a las comunidades energéticas en las subastas, Larreina Valderrama hace hincapié en que los criterios deberán ser diferentes, ya que los utilizados actualmente están pensados para las grandes empresas.

“Habría que adaptarlos a la realidad de las Comunidades energéticas, que si siguen el modelo de la directiva Europea deben tener excluida la finalidad de especulación financiera, y por tanto, estamos hablando de entidades sin ánimo de lucro”, remarca el Larreina Valderrama.

Asimismo, por el lado de la reserva de capacidad de cara a los concursos de acceso a la red eléctrica, que será de un 5% en este caso, el directivo señala que, si bien inicialmente puede ser suficiente, debería preverse una ampliación a futuro.

Por el lado de las subastas de potencia, Macías señala que si bien apostar por grandes parques o comunidades energéticas no es algo excluyente a cumplir los objetivos del PNIEC, también comenta que las renovables «no pueden cargar sobre sus hombres» con un sistema eléctrico que lleva años funcionando.

«Las comunidades energéticas están para reducir el uso de la red, hacer nuestros consumos más eficientes e implicar a la ciudadanía y las empresas en la generación y el consumo de su energía, no para bajar el recibo de la luz de aquellos que no apuestan por estas soluciones. Si nos centramos en el precio, puede ocurrir como en la última subasta de renovables que quedó casi desierta«, agrega el directivo.

«Como ya vivimos con el autoconsumo individual y el compartido, estamos ante tecnologías maduras, conocidas y competitivas, por lo que la verdadera duda es si haremos las comunidades energéticas lo suficientemente accesibles a ciudadanos, organismos públicos y empresas para que triunfen”, subraya el ejecutivo.

Siguiendo con esta idea, resalta que haría falta para brindar esa accesibilidad: «Seguridad en las instalaciones, simplicidad en las gestiones, visibilidad en el retorno de la inversión, que el consumidor vea que su esfuerzo económico a corto plazo implica grandes ahorros en el medio y largo plazo. Y la calidad en la ejecución y el correcto mantenimiento, fundamentales para que estos ahorros se mantengan en el tiempo». 

Crecimiento dentro del autoconsumo

Acerca del crecimiento de las comunidades en el medio del boom del autoconsumo, Larreina Valderrama resalta la necesidad de desarrollar a las pequeñas comunidades energéticas que generan menos de 100 kWp, dentro del crecimiento que ya está viviendo el autoconsumo, ya que pueden implementarse de forma exponencial en ámbitos rurales y urbanos.

Siguiendo con esta idea, el directivo señala que, hasta este documento, desde la administración española se ha impulsado a las energías renovables y al autoconsumo desde el enfoque de las grandes empresas.

“Cuando estas instalaciones pequeñas pueden contribuir a la generación de energía ‘Km0’, evitando las pérdidas en el transporte y fomentando una gestión participativa más cercana a los consumidores, para que puedan abordar con más efectividad situaciones de riesgo de pobreza energética o directamente de pobreza energética”, concluye Larreina Valderrama.

Mientras que, Macías afirma que si bien el autoconsumo ha tenido un aumento exponencial en España, multiplicando por 26 la potencia instalada anual en cuatro años, no es un crecimiento sostenible en el tiempo.

«Veremos que se estabiliza esa cifra y eso no será algo malo, todo lo contrario, dado que ahora las cadenas de suministro y mercado laboral asociado al autoconsumo están muy tensionados», explica el directivo. 

“Lo que sí creo que permitirá esta regulación es llevar el autoconsumo a nuevos consumidores que antes no se planteaban realizar los proyectos, y esos 5 kilómetros van abriendo la puerta a algo que parecía evidente, en un mundo digital e interconectado debemos saber cuáles son las limitaciones técnicas reales de los proyectos”, concluye Macías.

Cabe señalar que, de acuerdo a la publicación del MITECO, las aportaciones al proyecto de Real Decreto deben remitirse hasta el próximo 17 de mayo inclusive, a la dirección electrónica: bzn-sgernormativa@miteco.es, indicando en el asunto del correo “Alegaciones real decreto comunidades energéticas”.