El sector de renovables apunta al almacenamiento como una de las claves para la transición energética y la descarbonización, lo que genera expectativas en cuanto al desarrollo de este tipo de tecnología y los precios de las baterías.

Bajo ese marco, la Agencia Internacional de la Energía (AIE) publicó un informe en el que indica que los precios de las baterías de iones de litio cayeron un 90% desde el 2010 a nivel global, y se multiplicaron en cuanto a duración y densidad energética. Además, señala que se prevé que la tendencia siga a la baja y los precios caigan 40% más al 2030.

«La innovación adicional en las químicas y fabricación de baterías se proyecta que reduzca los costos promedio globales de las baterías de ion litio en un 40% adicional desde 2023 hasta 2030 y ponga en el mercado las baterías de ion sodio. En el Escenario de Emisiones Netas Cero (NZE), las químicas de ion litio siguen proporcionando la gran mayoría de las baterías para vehículos eléctricos hasta 2030. La innovación adicional tanto reduce los costos iniciales de las baterías de ion litio como trae mejoras adicionales en su rendimiento, especialmente en forma de mayores densidades de energía y una vida útil más larga», detalla el informe.

Por otro lado, la AIE asegura que, para alcanzar los objetivos establecidos en la COP 28, se debería multiplicar por seis la capacidad de almacenamiento a nivel mundial. “Para triplicar la capacidad global de energía renovable para 2030 manteniendo la seguridad eléctrica, la capacidad de almacenamiento de energía debe aumentar seis veces. Para facilitar la rápida adopción de nuevos sistemas solares fotovoltaicos y eólicos, la capacidad global de almacenamiento de energía aumenta a 1500 GW para 2030 en el Escenario de Emisiones Netas Cero”, señala.

Además, indica que la implementación de almacenamiento de baterías debe continuar en alza a un promedio del 25% anual hasta el 2030, y que eso requerirá acciones regulatorias.

Según detalla el informe, el almacenamiento de baterías fue la tecnología energética que más crecimiento tuvo el año pasado. «El mercado global de almacenamiento de baterías se duplicó en 2023, alcanzando más de 90 GWh y aumentando el volumen de almacenamiento de baterías en uso a más de 190 GWh. La mayor parte del crecimiento en el almacenamiento de baterías proviene de sistemas a escala de servicios públicos, mientras que el almacenamiento de baterías detrás del medidor representa el 35% del crecimiento anual en 2023. El almacenamiento de baterías fuera de la red está actualmente en volúmenes mucho más bajos», señala.

«El volumen de uso de baterías en el sector energético fue de más de 2 400 gigavatios-hora (GWh) en 2023, un aumento de cuatro veces desde 2020. Se han añadido más de 2 000 GWh de volumen de baterías de ion litio en los últimos cinco años, alimentando más de 40 millones de vehículos eléctricos y miles de proyectos de almacenamiento de baterías», agrega.

El uso de baterías está expandiéndose en el sector energético, y según detalla el informe, genera nuevos récords en las ventas de vehículos eléctricos y niveles récord de adiciones de almacenamiento de baterías en el sector eléctrico. «Uno de cada cinco automóviles vendidos en todo el mundo hoy en día es eléctrico, y un número creciente de proyectos de energía solar y eólica están asociados con baterías. Se están anunciando numerosas nuevas instalaciones de fabricación de celdas de batería en todo el mundo», detalla.

«La ampliación global de la producción de baterías ofrece numerosas oportunidades en toda la cadena de suministro. Sin embargo, también plantea varios desafíos, como una alta concentración geográfica de minerales críticos requeridos, la necesidad de instalaciones de reciclaje y reutilización, y la necesidad de abordar barreras regulatorias y políticas», indica el documento de la Agencia Internacional de Energía.

Mercado español

El almacenamiento es uno de los puntos claves de debate en España, debido a que el sector de renovables exige el desarrollo de nuevos marcos regulatorios y retributivos para poder impulsar esta tecnología, que señalan como solución a la inestabilidad del sistema eléctrico y los vertidos.

Cabe recordar que el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) prevé 22 GW de potencia instalada de almacenamiento en España al 2030, por lo que hay expectativas sobre el cumplimiento de ese objetivo. 

Desde el sector de renovables señalan al mercado de capacidad como una primera palanca de impulso del almacenamiento, y están a la espera de que se desarrolle durante los próximos meses. Especialistas indican que esta tecnología tiene el objetivo de contribuir a la absorción de vertidos y asegurar firmeza al sistema eléctrico.